sábado, 4 de junio de 2011
La pintura y la magía
En las cuevas de Altamira, pintó un bisonte para atrapar un bisonte. y el animal cayó bajo las lanzas de su tribu. Muchas reencarnaciones después, en el Renacimiento, pintó una mujer de sonrisa famosa para atrapar a esa mujer. Y Mona Lisa fue suya.
A mediados del siglo XX, su pincel imitó la impávida belleza de una lata de sopa. Y nunca faltó el alimento en su mesa. En el tercer milenio se gana la vida con mucho éxito haciendo identi-kit de sospechosos para la policía.
Nos seguimos viendo !!
Ana María Shua .. Cazadores de letras.
Las Cuevas de Altamira situadas junto a Santillana del Mar, Cantabria (España)
Lata de sopa Campbell de Warhol
Etiquetas:
batiburrilos de arte
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Grsacias es un boni recuerdo, las cuevas de altamira. Es mi tierra
ResponderEliminarMuy bella historia. Un abrazo grande.
ResponderEliminarMi niña preciosa las cuevas de Altamira,me remontaste a la época del cole. cuando las descubriamos por primera vez, debe ser espectacular estar allí, y luego las maravillas que se pueden hacer con el pincel. Un fuerte abrazo y genial fin de semana!
ResponderEliminarBesotes a las tres y gracias por pasar a dejar vuestros cariños y comentarios...
ResponderEliminarBello fin de semana